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Nuestros estudiantes de la Electiva de Profundización I – Proyección Social del programa de Ingeniería Agroambiental, desarrollaron un ejercicio de extensión rural orientado al diseño y análisis de planes de transición agroecológica, trabajando directamente con tres fincas rurales ubicadas en los municipios de El Tambo, Sotará y Silvia, en el departamento del Cauca, con el propósito de aplicar metodologías participativas, fortalecer procesos productivos sostenibles y aportar al bienestar de las familias vinculadas.
La experiencia académica tuvo como objetivo general proyectar y documentar el trabajo desarrollado por nuestros estudiantes mediante el uso de herramientas de extensión rural, como el Diagnóstico Rural Participativo (DRP) y la matriz de Instrumento de Planificación Predial para la Transición Agroecológica (IPPTA) de la Agencia de desarrollo Rural (ADR), las cuales permitieron caracterizar los sistemas productivos, identificar fortalezas y debilidades, y establecer el nivel de transición agroecológica de cada unidad productiva.
Nuestros estudiantes estuvieron organizados en tres grupos de trabajo y diseñaron propuestas específicas para cada finca:
- El primer grupo desarrolló el Plan de Transición Agroecológica mediante estrategias de extensión rural en la finca El Cerrito, ubicada en la vereda Sevilla, municipio de Zarzal, El Tambo.
- El segundo grupo formuló la ideación de un Plan Agroecológico en la finca “El Ámbito”, vereda Buenavista, municipio de Sotará.
- El tercer grupo trabajó la Transición Agroecológica con participación comunitaria en los cultivos de fresa y brócoli de la finca La Planada, vereda Buenavista, municipio de Silvia.
En este ámbito, las propuestas se consolidaron a partir de una planificación estructurada en dos fases:
- La primera fase correspondió a un nivel diagnóstico que permitió identificar el estado de los indicadores y ubicar a las fincas en un nivel de transición.
- La segunda fase estuvo enfocada en la aplicación de herramientas de extensión rural, orientadas a idear y definir las propuestas más adecuadas para cada finca y agricultor. A partir de este análisis, se identificó y formuló un plan de acción mediante el IPPTA, utilizando indicadores valorados en una escala de 1 a 5, donde las calificaciones más bajas reciben especial atención mediante planes de solución encaminados a su fortalecimiento.
El proceso de acompañamiento benefició de manera directa a tres familias rurales y generó un impacto indirecto en las comunidades cercanas a través de la difusión de prácticas agroecológicas y aprendizajes construidos de manera colectiva.
A partir del diagnóstico realizado, nuestros estudiantes evidenciaron un nivel intermedio de transición agroecológica, con prácticas tradicionales presentes, pero con disposición hacia la adopción de estrategias sostenibles. En respuesta a esto, ellos propusieron acciones orientadas a mejorar el manejo del suelo mediante abonos orgánicos y cobertura vegetal, diversificar los sistemas productivos, fortalecer la conservación del agua, optimizar el manejo de residuos y promover la toma de decisiones familiares a través de talleres participativos.
Como cierre del proceso, los estudiantes socializaron sus propuestas y entregaron a cada familia un libro de campo, el cual es una herramienta propia de la extensión rural que facilita el registro y seguimiento de las actividades diarias de la finca. A través de la proyección social, orientada al desarrollo comunitario y territorial, se consolidó la extensión rural como un eje clave para la transición hacia sistemas productivos más sostenibles en el Cauca.
