Emprendimiento y Soberanía Alimentaria juntos por la paz del Cauca

El Ministerio de Ciencias de la República de Colombia, a través de su programa de Oferta Institucional, abrió en el mes de marzo la convocatoria para el Programa Orquídeas, mujeres en la ciencia: Agentes para la Paz, cuyo objetivo, según se indica en la sitio web de MinCiencias es: “Conformar un banco de propuestas elegibles en las cuales se contemple la realización de proyectos de investigación, desarrollo tecnológico y/o innovación (I+D+i), que vinculen Doctoras para llevar a cabo estancias posdoctorales y Jóvenes Investigadora e Innovadoras colombianas, con el fin de intervenir al menos una de las temáticas establecidas en el reto “Poner fin a todas las formas de violencia en Colombia” en el marco de la Misión “Ciencia para la Paz”, e incrementar el nivel de desarrollo de vocaciones y capacidades investigativas, científicas, tecnológicas y de innovación de las mujeres en las diferentes regiones de Colombia.

Con esta premisa, las Dras. Magaly Gineth Cerón Rios, actual Coordinadora de la Unidad de Emprendimiento Unicomfacauca, y Yady Eliana Hernández Silva, quien fue docente de nuestro programa de Ingeniería Agroambiental, se postularon para las estancias de investigación con sus proyectos “Acciones para avanzar en la conectividad y formación agro digital 4.0 de las mujeres emprendedoras rurales del municipio del Tambo Cauca” y “Modelo de soberanía alimentaria para comunidades educativas con base en nuevas tecnologías para atender las problemáticas asociadas a la violencia alimentaria en el departamento del Cauca”, respectivamente.

Acciones para avanzar en la conectividad y formación agro digital 4.0 de las mujeres emprendedoras rurales del municipio del Tambo Cauca: Dra. Gineth Magaly Cerón Rios y la jóven investigadora, Isabel Hurtado, estudiante de Ingeniería Industrial.

Este proyecto surge de los problemas de desigualdad, falta de inclusión, participación y oportunidades tecnológicas, laborales y educativas. Se busca mejorar las condiciones socio-económicas y ambientales de mujeres rurales, vulnerables y víctimas del conflicto armado, mediante acciones tecnológicas para mejorar la conectividad y empoderar las mujeres tecnológicamente, ligado a la intervención y participación multisectorial e interdisciplinaria. Mejorando los procesos agrícolas, de transformación y comercialización a nuevos mercados.

El fin, es fortalecer el emprendimiento, la conectividad, la productividad e innovación social en las mujeres rurales de El Tambo, Cauca, capacitándolas en temas de liderazgo en línea y empoderamiento de género, permitiendo así la inclusión y contribución a su economía familiar mejorando su calidad de vida y disminuyendo el desempleo.

Modelo de soberanía alimentaria para comunidades educativas con base en nuevas tecnologías para atender las problemáticas asociadas a la violencia alimentaria en el departamento del Cauca: Dra. Yady Eliana Hernández Silva y la jóven investigadora, Sara Melissa Carvallo Trujillo, estudiante de Ingeniería de Sistemas.

La propuesta busca promover acciones encaminadas a mitigar los efectos del conflicto y del desplazamiento forzado, promoviendo escenarios de protección social, con miras a avanzar en la erradicación del hambre a través de un sistema alimentario y nutricional con enfoque en la población infantil.

En ese sentido la propuesta se articula al Plan Nacional de Desarrollo: Programa de Gobierno 2022 – 2026 Colombia Potencia Mundial de la Vida en el que se busca la paz total a través del respeto por los derechos, justicia, equidad y oportunidades para todos. El plan pone sus mayores énfasis en la disminución de las desigualdades, comprendiendo los contextos locales y regionales e  integrando las dinámicas territoriales,culturales y económicas. Así mismo, se articula al Plan Departamental de Desarrollo Cauca: 42 motivos para avanzar en la estrategia Equidad para la paz territorial que contempla acciones más determinantes hacia un territorio de equidad y paz. Incluye indicadores que den fe de la situación actual en materia de salud, agua potable y saneamiento básico, poblaciones vulnerables, promoción de cultura, la garantía de los derechos humanos. Por último, está articulada al Plan Municipal de Desarrollo: “Quilichao Vive” Municipio de Santander de Quilichao, en el programa Vive el Campo que busca impulsar el desarrollo del sector económico y productivo del municipio mediante el fortalecimiento agropecuario y desarrollo rural en todos los ámbitos.

Conozca aspectos más personales de los proyectos e ideologías de las Investigadoras.

Prensa Unicomfacauca: ¿Qué las motivó a postularse al Programa Orquídeas? 

Eliana Hernández: “Me encanta la investigación, el trabajo comunitario y el Programa Orquídeas me permite realizar ambas cosas, cuando conocí el Programa vi la oportunidad de profundizar en el tema de la soberanía alimentaria mediante el trabajo comunitario y la producción de publicaciones científicas. Además, me gusta la oportunidad que se tiene de contribuir en la formación de una joven investigadora”.

Magaly Cerón: “Principalmente, es por el hecho de que muchas mujeres que son cabeza de hogar han sido hace más de 50 años víctimas del conflicto armado y otras han estado incorporadas en grupos al margen de la ley; por esa razón, creemos que al fortalecer su propia fuente de financiación podrán superar toda esa violencia que han vivido, no seguirán siendo víctimas sino mujeres empoderadas, y además, aportarán al desarrollo económico de familia, todo esto a través del acceso y conectividad a nuevas tecnologías que permitan una mayor divulgación y visibilización de su emprendimiento”.

Prensa Unicomfacauca: ¿Por qué escogieron trabajar con los municipios de Santander de Quilichao y El Tambo? 

Eliana Hernández: “Elegí Santander de Quilichao en primer lugar por ser un municipio PDET, en segundo lugar porque he realizado algunos procesos de investigación con organizaciones sociales del municipio y me llama la atención los procesos que se han vivido a nivel comunitario y que han impulsado al desarrollo del territorio”.

Magaly Cerón: “El Tambo es un municipio que ha sufrido violencia, todavía lo sufre y más la mujer, en él se vive una cultura en la que ellas tienen que someterse de alguna forma a la voluntad del hombre y muchas veces no puede ser autosuficiente”. 

PU:  ¿Cómo esperan beneficiar a estas comunidades, qué resultados esperan dejar para esta región del departamento?

EH: “Espero contribuir a la solución de problemáticas asociadas a la violencia alimentaria a través de un modelo de soberanía alimentaria que esté basado en nuevas tecnologías, específicamente en comunidades educativas, ya que estas juegan un papel en la vida cotidiana que permite crear una oportunidad para fortalecer las investigaciones con los jóvenes”.

MC: “La posibilidad de brindar conectividad a Internet en zonas de difícil acceso a través de un nuevo prototipo que se realizó en colaboración de la Universidad Icesi, nodo Pacífico y otras entidades para transmitirlo a través de bandas libres de televisión. El segundo objetivo es poder alfabetizar digitalmente a estas emprendedoras, que puedan usar la tecnología a su favor y poder tener otra oportunidad no solo de comercializar sus productos sino también de capacitarse y usar la tecnología para beneficio de su familia, y por último sin ser menos importante, es fortalecer sus emprendimiento en la parte de sistematización y automatización de algunos procesos, entendiendo que no vamos a dar infraestructura pero sí brindar otro tipo de tecnologías que les pueda facilitar los procesos”.

PU: ¿Qué opinan del rol de la mujer en la ciencia?

EH: “La mujer a lo largo de la historia siempre ha jugado un papel importante que pocas veces se reconocía, esto poco a poco va cambiando y cada vez se reconoce a la mujer no solo como ser cuidadora de la vida sino también por su papel en las innovaciones tecnológicas, la ingeniería y la ciencia; campos dominados en su mayoría por hombres. Los espacios académicos cada vez tienen mayor presencia de mujeres, no solo en los pregrados sino también en los posgrados. La mujer aporta diversidad y nuevas perspectivas a las investigaciones. La desigualdad en los géneros está arraigada en la sociedad por estereotipos que se han creado sin tener en cuenta el gran potencial de las niñas, jóvenes y mujeres en la ciencia”.

MC: “La mujer en la ciencia demuestra que como mujeres también podemos aportar mucho conocimiento e innovación a todas las áreas y más en el ámbito social; sobre todo, podemos ayudar a nuestro mismo género en esos aspectos que continúan siendo complicados como es la violencia de género y más cuando muchas de las mujeres en la ciencia han tenido que luchar y vivir esas situaciones. Es importante entender que se ha marcado un antes y un después en la historia, ahora la mujer puede proponer y puede incluir nuevas ideas en diferentes ámbitos y que bueno que se empiece a reconocer ello acá en Colombia y específicamente en el Cauca”. 

PU: ¿Por qué se debería seguir alentando a las mujeres del país a ser partícipes de estos procesos, que a través de la investigación pueden ser parte de la solución a múltiples desafíos que vive la sociedad? 

EH: “La participación de las mujeres en los procesos de investigación es clave para lograr la igualdad de género y disminuir la brecha que ha dejado la exclusión de las mujeres de los espacios de toma de decisiones, esta inclusión y participación de la mujer debería de darse desde los hogares que son los primeros en sesgar y estereotipar desde la primera infancia a las mujeres en actividades del cuidado y de las labores domésticas”.

MC: “Considero que las mujeres deben seguir investigando y haciendo ciencia para construir soluciones en beneficio de la sociedad que tanto lo necesita. Es fundamental que como mujeres luchemos por cerrar esas brechas de violencia que no permiten que la paz se genere y que el desarrollo económico y social se evidencie. Por eso nuestra lucha debería ser con investigación, ciencia, conocimiento, propuestas, ideas que favorezcan el desarrollo de nuestro municipio, departamento y país desde el acceso a una educación de calidad, a nuevas tecnologías y al fomento del liderazgo en el lugar donde vivimos; a partir de ahí, se podrán generar construcciones en conjunto en pro de un interés común que es el bienestar de todos y aún más de cada una de las familias que representa una mujer”.